Una madre desesperada: robos y prohibiciones le quitan el pan a sus hijos
La situación de María, una madre soltera de un niño de 13 años con discapacidad y retraso madurativo, es desesperante. Vive en el barrio Solidaridad y lucha día a día para llevar el sustento a su hogar. Sin embargo, su realidad se ha vuelto insostenible debido a una serie de robos que ha sufrido en su casa y ahora, una prohibición municipal que le impide vender tortillas en la vía pública, su única fuente de ingresos.
El último robo sufrido en su hogar fue particularmente traumático para su hijo. Seis jóvenes irrumpieron en la casa mientras María estaba fuera vendiendo tortillas en Av. Pontusi y Fortín San Carlos. Amenazaron al niño con matarlo si no les permitía entrar, lo que lo dejó aterrorizado. Los ladrones se llevaron mercadería, elementos de trabajo, útiles escolares, ropa de abrigo y otros objetos de valor.
Este no es el primer robo que sufre María en su casa. Ya han entrado a robar en tres ocasiones anteriores, lo que ha generado un clima de inseguridad y miedo en la familia. El niño ha estado ausente en la escuela durante dos días debido al trauma y solo con el apoyo de su madre pudo regresar a clases.
La situación se complica aún más con la notificación de la municipalidad de que no puede continuar vendiendo tortillas en la vía pública debido a cuestiones de higiene. María depende de esta actividad para mantener a sus hijos y no tiene los recursos para poner un negocio en condiciones. La prohibición municipal la deja sin opciones para generar ingresos y alimentar a su familia.
A pesar de haber acudido a la municipalidad en busca de soluciones, María no ha recibido ayuda. Los funcionarios prometieron visitarla, pero nunca se presentaron. La madre está desesperada y no sabe cómo hará para alimentar a sus hijos. La situación requiere una solución urgente para que María pueda seguir adelante y darle a sus hijos el sustento que necesitan.

